DEVOLUCIÓN EN 30 DIAS
7 DÍAS EN AGUJAS
Los cilindros anticelulíticos son herramientas indispensables en protocolos profesionales de maderoterapia, ofreciendo resultados visibles en la reducción de celulitis, mejora de la circulación y reafirmación cutánea.
Su uso constante, combinado con hábitos saludables, transforma la silueta.
Los cilindros anticelulíticos son herramientas esenciales en la maderoterapia, fabricados en maderas densas como bambú, haya o nogal. Sus características principales incluyen:
Diseño ergonómico: Forma cilíndrica alargada (30-40 cm de largo) con superficie lisa o estriada para adaptarse a zonas amplias como muslos, glúteos y abdomen.
Versatilidad: Combaten la celulitis, activan la circulación y facilitan el drenaje linfático.
Resistencia: Ideales para aplicar presión profunda sin dañar la piel, gracias a bordes redondeados y pulidos.
1. Preparación:
Limpiar la piel con un exfoliante suave y aplicar aceite vegetal (ej.: aceite de jojoba) o crema anticelulítica.
Calentar el área con masaje manual o compresas tibias (3-5 minutos).
2. Movimientos Clave:
Dirección de los trazos:
Ascendente o hacia ganglios linfáticos: Deslizar desde las rodillas hacia la ingle (piernas), o desde el pubis hacia el ombligo (abdomen).
Técnica de "amasar y rodar": Combinar presión lineal con movimientos circulares para romper nódulos de grasa.
Presión y ritmo:
Fase reductora: Presión media-alta en movimientos lentos y profundos (10-12 minutos por zona).
Fase de drenaje: Movimientos rápidos y suaves hacia axilas o ingle para eliminar toxinas.
Uso específico:
Celulitis fibrosa (grado 3): Trabajar en zigzag con el cilindro estriado para descomponer tejido conectivo endurecido.
3. Combinación con Otras Herramientas:
Potenciar resultados con ventosas de silicona para drenaje profundo o espátula reafirmante en áreas flácidas.
Áreas prioritarias:
Muslos y cartucheras: Reduce la "piel de naranja" y define la silueta.
Glúteos: Levanta tejidos y mejora la elasticidad cutánea.
Abdomen y flancos: Combate grasa localizada y tonifica músculos.
Brazos: Afina la zona del tríceps y reduce flacidez.
Precauciones:
Evitar huesos prominentes (espinillas, costillas), varices, heridas o zonas inflamadas.
No usar en pieles con dermatitis activa o rosácea severa.
Reducción de celulitis: Rompe nódulos fibrosos y mejora la textura de la piel.
Activación circulatoria: Aumenta el flujo sanguíneo y oxigena tejidos.
Drenaje linfático eficaz: Elimina toxinas y reduce retención de líquidos.
Reafirmación cutánea: Estimula la producción de colágeno y elastina.
Efecto termogénico: Genera calor local que ayuda a metabolizar grasas.
Contraindicaciones: No aplicar en embarazadas, trombosis, osteoporosis o procesos inflamatorios agudos.
Limpieza: Desinfectar con alcohol isopropílico después de cada uso.
Frecuencia recomendada:
Tratamiento profesional: 2-3 sesiones semanales durante 6-8 semanas.
Mantenimiento: 1 sesión semanal.
Post-tratamiento:
Aplicar crema fría con mentol o cafeína.
Recomendar ejercicio cardiovascular y dieta baja en sodio.
Evaluación inicial: Identificar el grado de celulitis y zonas críticas mediante palpación.
Preparación: Exfoliar la piel y aplicar aceite de romero para activar la microcirculación.
Fase activa:
Trabajar muslos y glúteos con el cilindro en movimientos ascendentes (15 minutos).
Usar técnica de vibración en áreas con nódulos palpables.
Drenaje final: Dirigir toxinas hacia ganglios linfáticos con copa sueca.
Cierre: Aplicar mascarilla de algas frías para tonificar y sellar nutrientes.